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domingo, 15 de diciembre de 2013

La noche

Cuando cerramos el paso a la noche…
Hacia senderos secretos
nos recogemos tras las cortinas y los goznes
como para dejar de regalarnos a este mundo
no es que seamos más nosotros
es que estamos con nosotros.
Allá fuera le cedemos el paseo a los otros
en sus palabras y bailes
van dejando atrás el día encerrado en su mantra
y las estrellas nos miran inquietas,
como dando suerte a esa madrugada pagana.

En la penumbra de bares
nos conocemos cruzando los dedos para volver a vernos
nos peleamos y nos queremos
todo ello con el secreto de la noche
como si de otra realidad se tratase,
y la Luna con su mantra de luz enciende el negro y embellece los tonos blancos.

Yo conozco el tacto de tu cabello en la noche
es de un azul de cúpula que, en silencio, se desliza por las esquinas
como una sombra o un espíritu.
Yo conozco tus ojos en la noche
el vibrar de parpados y el pestañear de tus pupilas,
en un tintineo bien despierto.
Yo se de mí en la noche por lo que me dicen otros
y este es el regalo de la noche:
Que no nos da tiempo a contarnos historias al oído
ni a pensarnos desde dentro.
La noche pública es un bullicio de rostros
es un paseo por la ronda del cielo,
el tiempo se invierte
y se nos permite acariciarnos.

En la noche sin tiempo…
¿Qué secreto encierra esta madrugada,
qué hace salir y vibrar con las estrellas?
Será olvidarnos por un rato en casa
hasta el amanecer.
Abandonar por un rato la pertenencia a un hogar
y buscar nuevas habitaciones en los cuerpos ajenos.
Será dejar de ser nosotros por un tiempo
y ver el acomodado reloj del salón parado.

Como un viajero de tiempo
que se acomoda en los límites del si mismo.

domingo, 1 de diciembre de 2013

Los pasos cuando estabas
hacían oyuelos en mis mejillas
y mientras advertíamos
que el tiempo se suspendía
así mismo en el transitar
de un beso en los labios.

Entonces daría
como ahora doy
mi cuerpo a torcer
buscando un cuerpo
que por lejano es siniestro
que por no estar es silencio
y se mece con mis vértices
en un mentiroso sueño.

En desnudas palabras:
A veces lo que no tenemos
es el mejor ingrediente
para amenizar la soledad


viernes, 22 de noviembre de 2013

En el río

Se muerde las uñas en la orilla el río
se hace bella como una mujer joven
sus caderas ondean en los meandros,
o nos esconde los encantos
en las cavernas y recovecos
con el eco hace chapotear sus pasos.
Si yo pudiese seguir su camino lo haría
si por mis manos bastase un aleteo
como un alevín recién vertido al agua
hasta tomar corrientes lejanas
sin dudar lo haría.

De momento me quedo prendada
de las sombras de las nubes en su acuarela,
del reflejo de la vida en sus verdes entrañas
de un caminar sin pasos...

De tu poesía de tiempo y humedades
y sueño con los secretos que guardas
como si fuese una niña.

domingo, 17 de noviembre de 2013

Nostalgia

Para cuando tu vuelvas
ya te tengo guardado mi regazo
mis trozos huraños de arrullos y arañazos
mis tobillos para esperar de pie el salto
para cuando tú vuelvas
y la espera se vuelva tiempo en tus labios
y la esperanza se vuelva piel en tus manos
y la maldita lejanía que nos partió en dos
con hilos de nácar volverá a cosernos las ganas
las ganas de desatarnos
y que aparezcan tu peso sobre mi peso
tus besos sobre mis oquedades
los pedestales que construí para guardarte
las metáforas que cree para recordarte
las gotas de llanto guardadas en mi memoria
todo eso no es más que tiempo perdido
esperando como sigo
esperando que no consigo

salvar este vacío que hace cojear las patas de nuestro colchón

jueves, 7 de noviembre de 2013

Mare nostrum

La vida lactea, la via lactea, la estepa universal
todo universo es colosal
integrando los que se quedan y los que no están
todo universo es colosal
lleno de plumas y peras.

Enredaderas de granito y sal,
vertido el mare nostrum
enmarcado en cálidas riveras.

Extraterrestre
es un mar celeste donde flotan dátiles y piedras;
todo universo es un arca de madera
vórtices de un nadador sereno
como en ondas de sonido
comos en espesas hojas de parra,
en suelos lisos de cuarzo y arena.
Onduladas estepas,
praderas llenas de plantas azuladas y quimeras;
todo universo es un mare nostrum
un mar cálido donde flota un nadador desnudo
todo universo es colosal
lleno de sus plumas y peras.



lunes, 4 de noviembre de 2013

Las cuatro paredes de mi cuarto

La cercanía hace que los sueños ya sean humanos,
aquel fin para que el que no hay principio ni principito no esta de nuevo aquí,
ya nose cual fue el acontecimiento último
el último día antes de la nada.
Solo veo que el limbo de los dioses se disipa
y el mundo vuelve a ser mundano
en esta habitación,
las paredes color melocotón esconden algo
en sus vertices de pintura esta descrito lo palpable
esa sustancia viva que hace al mundo algo confortable
recuerdo que al llegar ni las mire, solo eran parte de un mundo;
que ahora vuelve a mí
llego despego alego
convencida de ello
de que en algún momento si afino el tacto podría tocar lo mas real de mí
entre esas cuatro paredes,
ese es mi principio y fin.

El no-beso

El suspiro que separa dos cuerpos
de labios cerrados.
En el aire dos piernas, 
y es que sino se toca el suelo bien no se puede llegar al beso
no se puede quedar uno suspendido en el aire
de vórtices separados
de mente en blanco;
Las bocas no susurran mas que un suspiro
el lenguaje del cuerpo esta vestido
no hay opción más que el no-beso
esa tensión de anhelo que quiere otro yo
quiero quiero quiero quiero
ese empuje de sal hacia otras aguas
esa mentira piadosa que es decir;
no, no estaba pensando en nada.